El pelaje del perro debe ser cuidado con regularidad para conservar su brillo. El polvo graso de las ciudades provoca que los perros pierdan pelo, por lo que deben ser cepillados con mas frecuencia que los perros que viven en el campo.
Es mejor utilizar un champú para perros, pues los de personas pueden provocar alergias, Para evitar que se pongo como el fieltro, es conveniente desenredar el pelaje antes de mojar al perro y proteger el interior de sus orejas con bolsas de algodón; forrar el fondo de la bañera con un tapete anti-derrapante, colocar al perro encima y ducharlo con agua tibia manteniendo el mango de la ducha muy cerca del cuerpo; comenzar por el cráneo y hacer que el agua penetre bien en el pelaje.
Gloría Suiza, este gigante de la especie canina desciende de los dogos del Tíbet. Procede de los molosos que cruzaron los Alpes con los romanos hace dos mil años. No se sabe con exactitud cuando llegaron al hospicio de Grand-Saint-Bernard los primeros representantes de la raza para que los monjes los adoptaran, pero, según ciertos cronistas, aparecieron a principios del siglo XI.
Este coloso es uno de los escasos perros autóctonos de Norteamérica, conocido como el perro oso ya que es un perro gigante. Sus orígenes parecen aún misteriosos. Sea como fuere, tendría sangre de labrador y de perros de trineo escandinavos llegados a la isla de Terranovaa finales del siglo XVII.